El gobierno de Estados Unidos expresó el domingo su preocupación por la violencia de las pandillas en El Salvador y por la aprobación de reformas al Código Penal que según dice se prestan para intentar censurar a los medios de comunicación e impedir que se informe sobre corrupción.
En un comunicado de prensa, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, dijo que las reformas se presentan también para intentar “silenciar a los críticos del gobierno salvadoreño”.
Las reformas impulsadas por el gobierno del presidente Nayib Bukele en medio de una fuerte ofensiva contra las pandillas buscan castigar con entre 10 y 15 años de prisión a quienes elaboren grafitis alusivos a esos grupos.
También establecen sanciones similares contra los que usen las tecnologías de comunicación e información, incluidos medios de comunicación radiofónicos, televisivos, escritos o digitales, que reproduzcan o transmitan mensajes o comunicados de las pandillas.
Antes el gobierno de la nación centroamericana decidió decretar un estado de excepción en todo el país durante 30 días, luego que el 26 de marzo los pandilleros asesinaran a 62 personas, un nivel de criminalidad que no se había visto en años, según las autoridades.
Blinken dijo, al respecto, que están “sumamente preocupados por el alza de violencia y homicidios cometidos en El Salvador el 25, 26, 27 de marzo por las pandillas Mara Salvatrucha y Barrio 18, que según cifras oficiales cobró la vida de 87 personas”.